Mira que a mi me gusta Samuel Eto'o. Creo que es un gran jugador y un gran delantero, con gol, con calidad, con técnica y....con carácter. Y eso es algo que se tiene que hacer ver el camerunés para no dejar entredicho su profesionalidad.
Ya se equivocó cuando, siendo jugador del Barça, en medio de la celebración de la Liga que consiguió aquella temporada (2005-2006), se acordó de su ex equipo y máximo rival, el Real Madrid. Algo que no está bien visto que hagan los jugadores y menos Samuel Eto'o.
Borrón y cuenta nueva. Con Pepe tuvo sus más y sus menos en el F.C. Barcelona y de ahí que el entrenador catalán decidiera cambiarlo por Ibrahimovic, que militaba en el Inter. Eto'o, siendo Mourinho entrenador, en su primera temporada en el Calcio el año pasado, consiguió la triple corona: Liga, Copa y Champions. Siendo un jugador importante pero no imprescindible.
Pero esta temporada, su segunda en el Inter, ha vuelto ha ganarse la cualidad de imprescindible, con Rafa Benñitez como entrenador. Ha marcado en todos los partidos de la fase de grupos de la Champions esta temporada, ha salvado en más de una ocasión al Inter, con goles que han valido un punto o, incluso, los tres.
Pero ayer de nuevo se equivoca, propinándole un cabezazo a César, defensa del Chievo Verona, justo después de que el propio César le propinase una serie de agarrones para terminar con un ligero puñetazo que no fue a mayores. Pero para Eto'o eso sí que fue suficiente, y tras una pequeña pausa, no se lo pensó dos veces y fue directamente a por el propio César, haciendo exactamente lo que hizo Zidane a Materazzi en la final del Mundial de Alemania de 2006.
Jugadores como estos yo no los quiero en mi equipo porque, aunque sean muy buenos y aparezcan en momentos decisivos, con sus actuaciones "agresivas" o sus calentones durante los partidos, me puedo quedar sin ellos durante gran parte de la temporada, algo que le va a ocurrir a Rafa Benítez. Lo que le faltaba al técnico madrileño, que tras la derrota de ayer, además de estar en la cuerda floja, perderá a Eto'o unas cuantas semanas.
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